HOT, HOT, HOT

Bueno, que ya he vuelto!! Y viendo como están las cosas por aquí, creo que hoy toca un post ferretero, ferretero y laaaargo, así que siéntate, relájate y aprende! ¿Ya tienes plan para este fin de semana? No? Pues si no es así, te propongo una excursión para la que no te hacen falta maletas, de hecho, cuanta menos ropa lleves, mejor (juajua). Hoy tocan los puntos calientes de la anatomía masculina. Algunas zonas, aparentemente inocentes, pero que bien “trabajadas” pueden hacer que suba la temperatura. La oreja, el pecho, el cuello, la espalda... entrégate en cuerpo y alma nena!!. La primera parada es el punto G y le siguen el O, el R, el F, el X... El punto G: El punto G masculino se encuentra en la próstata, justo debajo de la vejiga. Es una zona que requiere mucho tacto, pues al tocar este punto mágico, el hombre puede sentir la necesidad de orinar. Esta zona, sin embargo, no puede masajearse de forma directa, así que el camino a seguir es a través del perineo o de la pared del ano. (...