El Proyectoe: María del Río

La verdad no recuerdo la primera vez que oi el nombre de María, posiblemente fue después de ver alguno de sus trabajos para desubicados , una plataforma especial donde la música es un gusto y por ese gusto y amor, hacen clips maravillosos con directos ubicados en un lugar nada ubicado. El caso es que el tiempo y el buen criterio musical nos unieron bajo las (primeras) filas del grupo Pasajero y a la vez me sumergí en todas las palabras bonitas que escribe en sus MicroRelatos y MacroRelatos.
Un día le propuse participar en el #Proyectoe y aceptó tan encantada que ni me lo llegué a creer, ahora, leyendo este precioso texto aun me parece MÁS increíble.



No sé cantar ni tocar ningún instrumento pero lo que si sé es que la música forma parte de cada segundo de mi vida. Soy rotunda en esto porque si tengo que hacer un balance de lo que ha sido, es y será mi vida, lo haría a través de la música. Todos mis recuerdos (que no son pocos) tienen una melodía. Desde bien pequeña me acompañó la música directa o indirectamente de la mano. Me despertaba con música porque me dormía con ella. Cuando iba andando al colegio mis walkmans se agarraban a mi como si tuviéramos una relación amorosa de lo más pasional. Después de clase, en la habitación de mi hermano sonaban Los Ramones o los Rolling Stones y en el salón mi madre bailaba con Barry White. La música clásica y director de orquesta incluído era para los sábados por la mañana con mi querido padre. Compadezco a mis vecinos pero agradezco haber tenido una infancia y juventud con todas las notas musicales. Y es que la música fue la culpable de que mi mejor amiga y yo hiciéramos un programa de radio casero, de mil escapadas a conciertos, de comprar cassetes, vinilos y singles de todo tipo de música y de acompañarnos con nuestros primeros amores y las rupturas posteriores. A día de hoy la música me sigue acompañando en todos los ámbitos de mi vida. No me quejo. Ella nunca ha jugado al escondite conmigo y no me ha dado calabazas. Al contrario. Me da satisfacciones y alegría por todos los costados. Quizás por haber sido tan fiel con ella, me recompensó con amigos que aman la música por encima de todo y me empujó a que creara un proyecto de música del que me siento más que satisfecha. No concibo estar sin ella y creo que tampoco ella sin mí. La creo porque me lo susurró el otro día al oído. Y termino estas líneas como un tema musical que dura 3´45. ¿Adivináis cuál es?
………………………………………………………………………….

Gracias (increíble) María

Toe

Comentarios

Entradas populares de este blog

Deja a mi Amor abrir la Puerta de tu...Corazon...

Bombillas Despistadas o cómo decir lo que pasa cuando pasa